Ayer os enseñe el trabajo de Tristán Domecq que me dejo completamente fascinado ya que tiene una filosofía muy parecida a la mía que es recuperar todo aquello a lo que se le puede dar una nueva vida y un nuevo uso y complementarlo con cosas nuevas. Pues bien aquí os traigo otro trabajo suyo en esta ocasión un ático en Lavapies de dimensiones reducidas pero al cual le ha sacado todo su potencial.
Pintado en Blanco impoluto, han dejado a la vista las vigas de madera y recuperación de las ventanas antiguas existentes en la casa para decorar el salón. Con escasos muebles todos ellos funcionales y como no podría ser de otra manera rescatados y recuperados para darle ese toque de personalidad único característica de Tristán y podría decirse que también mía.
Fotos sacadas de su pagina de Facebook
¡Gracias por llegar hasta aquí!
¿Te ha gustado?
Si te suscríbes recibiras todas las novedades en tu bandeja de entrada.
¡Gratis y libre de SPAM!
¡Gratis y libre de SPAM!
Con que poco se puede decorar una casa maravillosamente. Todo un acierto.
ResponderEliminarUn saludo.
Mari la verdad que a veces nos obsesionamos en llenarlo todo para ocupar hasta el más mínimo rincón cuando con lo mínimo y lo necesario se crean espacios realmente acogedores. Aunque también es cierto que hoy he seleccionado este ático por la solución a los espacios pequeños.
Eliminarsaludos,
Pedro
Me encanta y si es verdad que nos obsesionamos con poner y poner... y cuánto menos y bien puesto mejor.
ResponderEliminarUn acierto tu publicación de este ático en Lavapies.
Me ha gustado mucho porque además tiene mucha luz, y da sensación de calma, alegría. Sabor del buen gusto.
Siempre se ha dicho menos es más..., la luz del ático es impresionante estoy contigo Juani y además me alegra saber que también te ha gustado mucho la publicación espero que te sirva de inspiración.
EliminarBesos,
Pedro