Convivencia entre casa y trabajo


Esta casa situada en la isla de Menorca pertenece a la diseñadora de zapatos Úrsula Mascaró. Pertenecía a un amigo y cuando la vendía no se lo pensó y la compro. Estaba divida en muchas habitaciones pero ella la transformo en unas pocas estancias abiertas para poder así conciliar la vida familiar y con amigos.

Quería una casa vivida donde si se rompe algo no se preocupa por nada no es una casa de "mírame y no me toques" al revés, como comenta ella en la entrevista. Cerca del pueblo a 100 m y con 6000m2 tiene la paz que necesita cuando quiere aislarse y sino puede acercarse al pueblo en pocos minutos. En ella convive su estudio de trabajo y hogar. 





Es una casa con multitud de objetos que ha ido adquiriendo y que le gustan, como siempre digo hay que personalizar las casas y las gamas de colores que usa me parecen de lo más acertada. Aunque parece abigarrada se aprecia cada detalle en todo su esplendor. 




    A quien no le gustaría tener una casa-estudio como esta? Que paséis un buen martes


Fotos: Pablo Zuloaga via Elle Decor