Ya estas imágenes protagonizaron un post aquí y me fije en las esculturas que llenaban la pared con su presencia, y que las protagonizaban animales.
Les aporta frescura, y casi que dan vida a esa pared vacía. Dan un aire natural, casi que nos transportan al lugar de donde vienen o están, esas golondrinas que abarcan una pared entera y que dan ganas de volar con ellas, o ese banco de peces escultura de los años 50 del cual parece que nos hemos sumergido en el mar.
Es otra opción a la que nos podemos acoger en lugar de llenar una pared con cuadros o fotos, podemos incluir la naturaleza en ella en formato escultura. Aquí unas imágenes más de decorar con animales.
¿Que os parece esta nueva tendencia de inundar la casa de naturaleza? Para mi es todo un acierto.