A la hora de decorar sabemos muy bien que con unos cuantos toques podemos cambiar el aspecto de cualquier estancia, en el caso que nos compete ahora de un dormitorio.
Usando los colores, ciertos objetos del mobiliario y cambiando otros, creamos tres ambientes, ese estilo que nos identifica como persona y que nos hace ser nosotros mismos. Textiles, accesorios e incluso fotografías personales identificarán que nos encontramos en casa, en ese espacio que tanto nos gusta y que con tanto mimo hemos preparado.
- En la primea imagen vemos un dormitorio que podría denominarlo shabby chic, se distinguen por utilizar una paleta de colores pasteles, tales como rosa, verde agua, etc..., con predominancia del blanco. Muebles de tonalidades muy suaves buscando un aspecto deliberadamente envejecido, como estas sillas de hierro decapado y aspecto desgastado. Algo que me chirria un poco en la combinación es el buda.
- En la segunda propuesta, nos encontramos con un estilo más masculino, con pocos elementos, solamente un taburete con una cerámica para la mesita de noche, un cuadro XL con una gran C y dos jarrones en blanco con formas geometricas y de estilo más contemporáneo.
- La última diría yo que es la que más encaja conmigo, algo más ecléctica. Nos encontramos con lo que podría ser las mesitas de noche, una silla de estilo actual y al otro lado una mesita de madera antigua más vintage, los textiles en mis colores preferidos para el dormitorio: azules, grises y blancos. Objetos personales, como podrían ser la tinaja y revistas del banquito de delante -que me chifla por cierto- y las fotografías personales que se encuentra en la pared frontal sin cabecero.
¿y a vosotros? ¿cual de ellos encajaría con vuestra personalidad?
Feliz martes a todos.
Imágenes: HouseofC