El éxito del blanco

Tengo que reconocer que en cuanto me encuentro un proyecto decorativo que empieza así, con este color, el blanco, me paro a mirarlo. Este color que evoca a pureza, sencillez, limpieza y el cual da comienzo para cualquier proyecto de decoración,  está claro que se ha quedado entre nosotros. Es lo que me ha pasado con esta imagen de arriba, impoluta y salpicada por otros colores, pero con una limpieza visual que me ha impactado. 

Este piso situado en pleno centro de Madrid, es propiedad del fotógrafo Adrian Tyler. Se enamoró de él nada más verlo y lo hizo su residencia. Respetando su antiguedad que data del año 1894, conservaron ciertas piezas de la casa como la chimenea y suelos. Amplio para dar cabida a toda su obra, con muebles de distintas procedencias, un eclecticismo que me apasiona, porque habla muy bien de cada propietario, descubriéndonos así su mundo más personal.

El dormitorio principal me ha entusiasmado, en él se encuentra este cuadro barroco del S. XVII de Manuel Benito Agüero, la mesilla es un antiguo mueble de oficina y sobre ella una fotografía del propio artista, como casi en toda la casa.

Una casa realmente impresionante llena de tesoros, sin interrupciones visuales, donde todo fluye. Podríamos decir que es una galería de arte personal. Si queréis ver más entrar en la web de AD

Imágenes: Belén Imaz vía web AD