Esta vieja fabrica situada en Brooklyn NY pertenece a una pareja, en la que sus propios trabajos también se dan de la mano, un estilista de interiores y ella en moda. Es un loft donde todos los espacios son visibles desde cualquier rincón pero muy bien separados visualmente, donde comedor, cocina, salón y demás hacen un todo.
La cultura de la compra en mercadillos la tienen arraigada ya que muchas de sus piezas son compradas en dicho lugares, con otras procedentes de los Eames o Hans Wegnercontemporaneas. Sus propietarios lo definen como "Efecto caleidoscopio", podréis ver el reportaje en la web de la revista AD. Una mezcla eclética que yo siempre busco y que tanto me gusta, es como estar en una biblioteca llena de libros de donde uno puede aprender tanto.
Me encanta el espacio abierto! Y el colorido...
ResponderEliminarGracias por compartirlo.
Un beso